Final de carrera: 1994
Retorno: 2001
Bajas: Slash & Duff (“no invitados” a la fiesta), Izzy Stradlin (se había marchado en 1991)
Disco desde retorno: ninguno, aunque hay muchas demos rodando de Chinese Democracy
Lo Mejor: Recuperar un espectáculo que no debería haberse perdido. Algunos temas nuevos suenan realmente bien.
Lo Peor: Axl ha tirado por la borda 10 años y ahora está gordo y falto de chispa. Algunos miembros de la banda son indignos. Demasiada espera al disco nuevo.
Bueno, éste es peliagudo. De hecho, oficialmente Guns n’ Roses nunca se disolvieron. Pero no me negareis que no dar señales de vida en 7 años, temporada en la que tan sólo un miembro original no ha abandonado la banda, no es poco menos que un final. Durante más de un lustro nadie supo gran cosa de Axl Rose. Ni siquiera una triste imagen. Hasta ese año 99 en que se le detuvo por un altercado en un aeropuerto, y el mundo pudo ver por fin, una foto del divo, la de su ficha policial: con su ya habitual barba, con el pelo corto y bastante gordo. Ese año, sin embargo, ya surgieron las primeras informaciones sobre el retorno de la banda, que supuestamente estaría grabando un disco nuevo de extraño título, “Chinese Democracy”. La banda estaba compuesta por Axl y un viejo colaborador del pasado, el teclista Dizzy Reed, un tipo gris pero con una flor en el culo considerable, pues siendo un músico mediocre, supo mantener su puesto. Les acompañaban Buckethead, Paul Tobias Huge (sí, Tobias, como en las tiras cómicas de “El Jueves”), Robin Fink, Tommy Stinson y Josh Freeze. Lo más divertido de esa época fueron los rumores. Imaginaos una banda ensayando horas y horas y grabando sin parar fragmentos de canciones que sólo estaban completas en la mente de Axl Rose. De hecho, creo recordar que fue Josh Freeze el que se largó porque estaba harto de “grabar fragmentos de batería sin parar, inconexos”. La rumorología de nombres era estupenda, aunque a menudo se tratara simplemente de eso, rumores. Dave Navarro, Brian May, Dave Abruzzese, productores como Moby, e incluso Shaquille O’Neal que supuestamente había grabado un rapeado con ellos (¿?). Era una etapa de confusión en la que la banda sacó una canción nueva, “Oh My God”, con un sonido menos clásico que el habitual, más cercano al rock industrial, que colaron en la BSO de la peli “El fin de los días”. Era 1999, y todos pensamos que eso marcaría el inicio de su vuelta. Pero no fue así. Los “nuevos” Guns n’ Roses desaparecían de nuevo en su interminable disco de estudio y lo único que sacaban era un disco en directo con retales de su vieja época. Robin Fink incluso dejó a la banda, se unió a su grupo de siempre, NIN, para hacer una gira, acabó la gira, volvió al seno de los Gunners… y el disco todavía estaba por hacer!!
Fue en el primero de 2001 cuando Guns n’ Roses oficialmente volvieron, para un concierto televisado por la MTV. Todas las miradas estaban puestas en Axl, que apareció gordo, eso sí, pero con el pelo largo, sin barba, y un look extrañamente deportivo. La banda sonó bien, y Axl se mantuvo más o menos bien. Así que a pesar de que los fans estaban extrañados, aprobadillo. Su gran retorno de ese año fue en el festival Rock in Rio. Estrenaban algunas canciones nuevas que sonaban realmente interesanes. Pero al final, la misma historia, parón, nada de disco, y todo como siempre. Entre ese año y 2006, la banda inició algunas giras que nunca acabó, cancelaban conciertos, tenían períodos de inactividad… y de disco, pues nada de nada. Fue, finalmente, en 2006 cuando los nuevos Guns n’ Roses adoptaron una actividad más o menos “normal”. La banda la formaban un Axl con un tocado de trencitas y perilla, Dizzy, Tommy, Robin Fink, y tres miembros nuevos, Bumblefoot, Richard Fortus y el batería Brian Mantia. Aparecen fotos promocionales del divo, y se anuncia, por fin, una gira que no se cancela a la mitad. Y comienzan a salir posibles fechas de lanzamiento de “Chinese Democracy”, fechas que no se cumplen nunca, aunque ya rondan por Internet decenas de demos de canciones nuevas. Y declaraciones escandalosas, como en el pasado. En esta nueva gira les acompaña el éxito, pues la gente tiene hambre de los Gunners. Las opiniones son diversas. La mía, pues que pese a todo, son capaces de hacer grandes shows, y las canciones nuevas suenan más que bien. Pero queden las cosas claras, de la nueva banda sólo son dignos de estar Robin Fink y Tommy Stinson. El resto da penica. Y Axl ha perdido bastante. En fiereza, en actitud, en feeling, en voz, en presencia. Y bien, estamos en septiembre de 2007. Podemos decir que Axl Rose ha tirado estúpidamente su juventud en ese retiro voluntario. Y lo mejor que podrían hacer es reunirse Axl, Duff, Slash e Izzy de una santa vez. Por cierto, de “Chinese Democracy” todavía, nada de nada.
A la izquierda Guns n’ Roses… a la derecha, lo que queda de ellos
Banda: Queen
Final de carrera: 1991
Retorno: 2005
Bajas: Freddie Mercury (muerto en 1991), John Deacon (se negó a participar)
Disco tras retorno: ninguno
Lo Mejor: La arriesgada apuesta que hicieron al contar con Paul Rodgers, un cantante excelente pero con un registro y un estilo muy diferente al de Mercury.
Lo Peor: Que John Deacon no quisiera unirse. En el fondo, me hubiera gustado un cantante más cercano, en estilo a Mercury… hubiera estado bien un show múltiple con George Michael y Justin Hawkins a las voces.
Resucitar una banda que contaba con un frontman muy carismático es un asunto complicado, y en general sólo sale bien si se busca el sustituto con mucho cuidado. Y en el caso de Queen, bueno, ellos tenían una papeleta difícil de resolver. Ya sabéis, Freddie era mucho Freddie. Y a pesar de la complicación del asunto, muy pronto se habló de continuar con otro cantante. Por lo menos todo eran habladurías en la prensa. Es lógico, Queen habían llegado a una cumbre en ese final/principio de década entre los 80’s y los 90’s, en lo que a popularidad se refiere. En 1992 se hizo un macroconcierto homenaje a Freddie Mercury en el que varios artistas tocaban con los tres supervivientes. Y se puede destacar la actuación que hizo George Michael con la banda, bordando un “Somebody to love”. Claro, en esa época Michael estaba en el dique seco, peleado con su discográfica, y se especulo mucho con su ingreso en la Reina. Por supuesto que George Michael no tiene ni el carisma, ni la actitud, ni la fuerza de Mercury. Sin embargo hay que reconocerlo, esa noche fue uno de los triunfadores. Pero al final nada. Y transcurrieron muchos años hasta que sonó otro candidato en firme. Y no era otro que Robbie Williams. La cosa, a priori, sonaba esperpéntica. Por lo visto, Williams tuvo una cierta amistad con la banda, y grabó una versión de “We will rock you” con los Queen restantes para la banda sonora de la película “Destino de Caballero” (2001). Al final, la banda decidió no dar este paso tan arriesgado. Aunque para ser sincero, si bien Williams no le llega a la suela del zapato a Mercury, un retorno con un cantante joven pudiera haber sido un golpe de efecto. Claro, de voz, no daba la talla ni de lejos. Sin embargo, esa fue la señal de que la cosa iba en serio. Y al final el elegido fue Paul Rodgers. A priori no está mal, Rodgers es un grandioso cantante, con un enorme bagaje rockero, un buen frontman, de la misma quinta que los Queen… para mi gusto, el problema es que se trata de un cantante muy diferente de lo que era Freddie Mercury. En todo. En voz. En actitud. En puesta en escena. Y así, decidieron tirar adelante una gira mundial Queen + Paul Rodgers en la que John Deacon no quiso estar presente, una pena. Personalmente no veo mal que Brian May y Roger Taylor resucitaran el nombre de la reina, aún sin Mercury (claro) y Deacon, ya que el espectáculo que daban era de calidad y qué duda cabe que la presencia de Rodgers sumaba enteros al proyecto. No todos sus fans lo entendieron del mismo modo, así que hubieron opiniones contrastadas. Así, hicieron gira y se acabó. ¿Y el futuro? Por el momento, todo habladurías, aunque espero sinceramente que no se les ocurra grabar un nuevo disco con esa formación.
Queen sin Freddie es tan extraño…
Banda: The Who
Final de carrera: 1983
Retorno: 1999 (aunque hicieron intentonas en 1989 y en 1996/97)
Bajas: Keith Moon (muerto en 1978), John Entwhistle (muerto en 2002)
Disco tras retorno: Endless Wire (2006)
Lo Mejor: Retornar con tanta fuerza como lo hicieron, tras arrastrarse por los escenarios desde los 80’s. La recuperación de Pete Townshed.
Lo Peor: La muerte sorprendente de John Entwhistle. Su nuevo disco, aburridote.
The Who entraron en franca decadencia con la muerte del batería Keith Moon (1978) y la entrada de los 80’s. De hecho, su carrera entre ese fatídico 1978 y su final en 1983 fue bastante discretita. En el 89 ya hicieron un conato de retorno, con una gira que celebraba el 25 aniversario del grupo, con Roger Daltrey, Pete Townshed y John Entwhistle. El problema fue que en esa época el guitarrista Pete Townshed tenía un grave problema de sordera probablemente a causa de haberse sometido a volúmenes exagerados (cosa que, por otra parte, a todos los aficionados al rock, los auriculares y los conciertos no deja de acojonarnos un poco), y había perdido, obviamente, muchas facultades para enfrentarse a un directo, y necesitaba algo inusual en él, necesitaba un guitarra que le cubriera, su hijo Simon. En fin, algo cutre. En 1996 repitieron con una experiencia parecida, en este caso se trataba de plasmar todo la obra de Quadrophenia sobre las tablas. Las cosas, no obstante, tampoco mejoraron mucho, y para ser sinceros, mientras que los Stones, por ejemplo, en el 96/97 hicieron la mejor de sus giras desde los lejanos tiempos de Tattoo You, The Who, una banda que siempre se había caracterizado por unos directos arrolladores y emocionantes, se arrastraba por el escenario. Es por ello que a todos sorprendió que The Who decidieran retornar a la carretera en 1999. Y lo sorprendente fue encontrarse con un Pete Townshed en plenas facultades, sin ningún guitarrista de apoyo, la banda formada por un siempre potente Roger Daltrey, por John Entwhistle y por el recuperado Pete Townshed, apoyados por un batería de sesión y un teclista en algunas piezas. Por lo visto, Townshed se recuperó de su sordera mediante técnicas de homeopatía y finalmente The Who pudo retornar como se merecían. La cosa no duró mucho, ya que increíblemente, tras pasar unos años 60’s y 70’s de excesos y sobrevivir, en la primavera del año 2002 se halló el cuerpo del bajista John Entwhistle muerto en un hotel de Las Vegas debido a problemas derivados de la coca. La decisión fue cuanto menos polémica, pero Daltrey y Townshed decidían continuar como miembros originales de la banda, sustituyendo a Entwhistle por un bajista de sesión con nombre Felliniano: Pino Palladino. En mi opinión, no obraron mal. Tras muchos años de arrastrarse sin levantar cabeza, casi 20, por fin podían demostrar a las nuevas generaciones quién eran The Who. Se echaba de menos a Entwhistle, claro, pero la pareja original estaba en una forma envidiable. En 2006 sacaron un nuevo disco, “Endless Wire”, y la verdad, es un aburrimiento de disco. Poquita cosa para ser de quien es. Todo se les perdona por seguir haciendo conciertos extraordinarios en los que, eso sí, los temas nuevos palidecen peligrosamente ante el repertorio clásico. Pero eso pasa en las mejores familias. Y si no, que se lo pregunten a los Rolling Stones.
Ok, Pete Townshed no tiene mucha pinta de rockear
CONTINUARÁ
Canciones:
Otis Redding: «Cigarrettes & coffee»
Kiss: «Strutter»
Los Rebeldes: «Un español en Nueva York»