Ahora casi ya no lo recordamos, pero algunos todavía tenemos en la memoria esa época infausta en la que, de repente, todo el mundo se convirtió en fan de los dichosos El Último de la Fila. Fue hace ya muchos años, a mediados de los 90s, cuando publicaron el celebérrimo disco “Astronomía Razonable” y por arte de birlibirloque, lo petaron, hablando mal y pronto. Como suele ocurrir en estos casos, el problema no estaba tanto en el LP en cuestión, que en realidad puedo decir que no estaba mal, sino en ese grueso de fans pesadísimos que de repente se apresuraron a conseguir todo lo grabado por sus nuevos ídolos, sean discos previos o incluso de proyectos anteriores a El Último de la Fila, a saber, Los Burros y Los Rápidos. ¿Que cómo sé yo de esos proyectos? Pues amigos, muy sencillo, yo también sufrí a mi alrededor la presencia de fans pesados gravitando en mis círculos de amistades y familia. Yo era sólo un niño. Y la ONU no hizo nada al respecto.
Es más, yo tuve mi etapa de interesarme por aquella música y aquél disco, y sí, recuerdo una vieja TDK que escuché con cierta frecuencia durante una época. Tal vez fuera una necesidad de integración, puede que quisiera saber qué era aquello tan bueno que me estaba perdiendo, quizás simplemente me gustó. No recuerdo que me durara mucho más allá del verano de 1993, mi interés por El Último de la Fila. En realidad supongo que quería congraciarme con un amigo que era fan fatal.
Hay que decir que el grupo no estiró el chicle para ganar dinero a espuertas, lo cual les honra: en 1995, dos años después de tener ese éxito que ni ellos se creyeron, publicaron un esperadísimo disco de continuación, que acabó no convenciendo a nadie, y, sencillamente, decidieron dejarlo. Aquello dejó huérfana a esa legión de fans que los había idolatrado cual becerro de oro del pop patrio. Recuerdo claramente a mi amigo tratando de asumir el primer disco en solitario, y tras la ruptura, de Quimi Portet, una suerte de empanada más cercana a los discos de Jaume Sisa que al dichoso burro amarrado en la puerta del baile.

Fan emocionado por ver a Manolo sobre el escenario (by @carloskarmolina)
Por suerte para él, el otro componente, Manolo García, también emprendió una carrera en solitario. Y este sí supo lanzar sus redes para recoger a esa pléyade de fans de su antiguo grupo, grabando un LP que sonaba a descartes chungos de El Último de la Fila. ¿Que cómo lo sé? Bueno, entonces yo todavía era amigo de aquél muchacho fan, que sí, celebró la vuelta del hijo pródigo. Pero para las personas de bien como el juntaletras que suscribe, aquello fue un infierno. No sólo había que aguantar a los fans, sino también la permanente presencia de esas canciones de mierda en bares, pubs y cualquier otro lugar de mi ecosistema juvenil. Además… ¿Manolo García? ¿Qué clase de cantante de pop se puede labrar una carrera llamándose “Manolo García” como si fuera el estanquero del barrio?
Por fortuna, la carrera en solitario del tal García se volvió un poco como una gaeosa agitada, y pasada la efervescencia inicial, su estrella se fue apagando, y le honra que, una vez más, tampoco explotara al límite ese éxito inicial, para ir pasando, poco a poco, a un segundo plano, y quedar sepultado entre triunfitos, hits de electro latino y la crisis de la industria discográfica. Y ya no tuve que aguantar a más fans histéricos.
Y con la perspectiva que da el tiempo, me puedo permitir ver todo aquello como un engorro temporal. Y si sí, continúo odiando a muerte esas canciones del dichoso Manolo García, pero puedo apreciar algunas cosas interesantes por aquí y por allá en El Último de la Fila. Especialmente en esos títulos tan ingeniosos y descacharrantes como “Cuando la pobreza entra por la puerta, el amor salta por la ventana”, “Enemigos de lo ajeno” o “La rebelión de los hombres rana”. Incluso me hace gracia esa mezcla de costumbrismo y surrealismo que tiene la letra de “Como un Burro Amarrado en la Puerta del Baile”. Será que me estoy haciendo mayor. Será.
Canciones:
Pues tiene gracia que publique esta entrada justo ahora, Herr Gobo. Últimamente estoy intentando meterme a fondo con estos tíos, cosa que jamás hice en su época de gloria porque estaba bastante más pendiente de Aerosmith.
Aún así reconozco que tenían algo que me llamaban la atención y ahora, 20 añazos después, por fín he encontrado tiempo para prestarles un poco de atención. Además siempre tuvieron (y seguirán teniendo, seguramente) no sé cómo llamarlo. Prestigio o una pátina de grupo de culto, respetable. Era como si los entendidos escucharan a el Último de la Fila y los retromongos se conformaran con escuchar a Amistades Peligrosas (grupazo!!!).
Por otra parte…. por un gallifante: de qué capítulo está sacada esa captura de Nelson Muntz que acompaña su entrada?
Abrazo!
AmiC Barón, su última pregunta es de una respuesta obvia… Bart consigue un carné de conducir falso y se va con Nelson, Milhouse y Martin a la feria mundial de Nashville. De camino paran en Mason, porque Nelson se empeña. Grandísimo episodio.
Dicho lo cual, si bien El Último De La Fila no eran Amistades Peligrosas ni de lejos, reconozco que algunos acercamientos he he vuelto a hacer a su discografía me han tirado para atrás. Las letras son hilarantes, eso sí.
Bronson, pero se la doy por buena.
La mayoría de la plantilla se han ido a Colonia a celebrar no sé qué rollo de fiesta de navidad pero como yo tengo ciertos rasgos de autismo…. Me he quedado aquí, asín que estoy prácticamente solo en la empresa y puedo entretenerme comentando en su blog. La vida es bella.
ni p’a ti ni p’a mi: https://en.wikipedia.org/wiki/Macon,_Georgia
me alegro de su decisión (y de que infle las visitas a mi blog), yo también me he vuelto un puto asocial y me salto la comida de navidad de mi empresa (ergo, 23 de diciembre fiesta!). Por cierto, tengo una entrada en mente, de corte viajero y escatológico que le gustará. A ver cuándo tengo un rato…
No se confunda Gobo. Cierto, Nelson «siempre quiso visitar Macon, Georgia». Pero la parada para ver a Andy Williams la hacen en Branson, Missouri. Hágame caso.
http://simpsons.wikia.com/wiki/Branson
Si hoy no he entrado 10 veces a su blog no he entrado ninguna. Lo que hace el tedio, óigame.
es usted sabio, caballero. Claro que sí, Branson, Missouri. Bravo.