Comenzare diciendo que estoy escribiendo desde un PC local, que he ocupado en el hotel. No, mi portatil no ha resucitado, y ahi ando, en condiciones precarias. Esa es la razon por la cual no encontrareis ninguna tilde en este texto. Y aunque haga danyo (no, tampoco hay enye) a la vista, habra que seguir con lo que hay: this is Africa
“Es tan salvaje y subdesarrollado como te lo imaginabas?”, me preguntaba hoy, socarronamente, uno de mis contactos aqui. Supongo que harto de extranjeros que llegan con ideas preconcebidas del continente y del pais. Pues no, la verdad es que no. Tampoco es que me lo imaginara asi, claro, si bien es indudable que los prejuicios estan ahi. Siempre. Tampoco es que haya tenido mucha oportunidad, de momento, de experimentar mucho. El trabajo, y tal. Ya sabeis.
Este muchacho que tiraba de ironia es un blanquito. El otro tipo que me acompanya por aqui es un negro. Zulu, concretamente, me dijo que era. Zulu. A mi, esto de zulu me transporta directamente a las peliculas del sabado por la tarde, despues de los dibujos del mediodia, de “Shaka Zulu” y “Amanecer Zulu” y todas esas cintas de britanicos vestiditos con casacas rojas.
El zulu me dice que habla 6 de la docena de lenguas oficiales del pais (chupate esa, gobierno autonomico de Aragon), si bien en general el estandar linguistico oficial es el ingles, lengua que por encima del zulu, del Afrikaans o cualquier otra, se habla a nivel professional. Una muestra mas de que el ingles, le pese a quien le pese, es el Esperanto del mundo actual. Si, queridos, vosotros estudiad chino, y esas mandangas. Nos guste o no, con el ingles se llega a (casi) todo el mundo. Mas o menos.
Antes de venir anduve preguntado a un par de personas que habian estado en el pais. Todos ellos me destacaron que la cuestion de la seguridad era un problema. Basicamente, me dijeron que ni se me ocurriera salir solo a la calle. Otros me decian que incluso nada de ir en un coche con las ventanillas bajadas. Pues bien, nada mas llegar, anoche, mi amigo zulu, que me recogio en el aeropuerto, iba en su coche con las 2 ventanillas bajadas. Subi la mia, si, aunque mas por el aire que por la seguridad. Que iba a hacer? Estadisticamente, Sudafrica es uno de los paises con mayor indice de criminalidad por habitante, eso es un dato insoslayable. Esta tarde, al acabar, he preguntado si era seguro darme una vuelta… esto es, al fin y al cabo, Pretoria, y ni siquiera estoy en una zona muy residencial que digamos. No es Jo’Burg (como dicen ellos a Johannesburg), ni Ciudad Del Cabo. EL zulu me ha sonreido y me ha dicho algo asi como “esto es lo de siempre… si dudas en el camino que estas recorriendo, y alguien te ve dubitativo, se pueden aprovechar, pero si vas con paso firme, entonces no hay problema”. No me ha parecido una perspectiva muy halaguenya, como no voy a dudar si no se donde estoy. Y al final, me he ido al hotel.
Espero que me saquen de paseo un dia de estos. No me gusta la idea de estar en un lugar nuevo y verme encerrado en una especie de pecera. Pero queridos mios, mi sentido de la aventura no pasa por adentrarme en las calles solo en un pais con tan mala estadistica que incluso en la propia habitacion del hotel tienen un diptico en el que desaconsejan que el turista ande solo o en zonas poco iluminadas.
Canciones:
Sonic Youth: “100%”
Graveyard: “An Industry Of Murder”
Joao Gilberto: “Desafinado”
Desde Joburg, tres horas en avión para cruzar el Canal de Mozambique y te plantas en Madagascar.
Si algún día me decido, confío en que me hagas de guía!