La noche del viernes se me apareció Jim Morrison en sueños. La expresión suena a bíblica, pero realmente fue así. No se trataba de un sueño con una sucesión secuencial de situaciones, ni mucho menos con un hilo argumental claro. De hecho, la aparición de Jim resultó inesperada, en tanto ese término se pudiera aplicar a algo tan anárquico como un sueño. El caso es que sí, de repente, allí estaba el eterno vocalista de los Doors, en su faceta más mesiánica. Su aspecto no era el del insolente sex symbol cuyas fotografías adornan carpetas y paredes. Tampoco el de ese Morrison envejecido, gordo, barbudo y con los ojos hundidos que se muestran en sus últimas imágenes previas a su muerte, cuando aún teniendo 27 años, aparentaba tener cuarenta.
La imagen de Jim Morrison en mi sueño la he visto en algún sitio, claro. No ha sido generada espontáneamente por mi cerebro. ¿Etapa “The Soft Parade”, tal vez? Qué importa. El caso es que allí estaba, y me decía algo. Una frase de esas lapidarias que se le atribuyen al Rey Lagarto en su rol de chamán. Luego desperté. Y ya no recordaba qué me había dicho. Era algo con un cierto mensaje vital a lo carpe diem, pero más provocativo. Tal vez fuera una apología de las sustancias o de sodomizar jovencitas vírgenes. Era también una proclama en contra de la mediocridad. Era una idea revolucionaria, no a un nivel político, sino personal, introspectivo. Era, en definitiva, algo que me impactó. Lo suficiente como para sacarme del estado onírico y despertarme.
Pero como si en realidad no hubiera sino querido gastarme una broma, en cuanto abrí los ojos, fuí incapaz de recordar lo que había dicho. Lo sé, os he dejado con las ganas de saber qué diablos tenía Jim Morrison que decirme. O si tal vez me había escogido para dictarme un nuevo poema o una nueva canción, desde luego se equivocó en la elección. Y como es improbable que me visite otra vez en sueños (preferentemente), no me queda sino pensar en qué extraño mecanismo colocó a Jim Morrison en mi sueño, cuando hace bastante que no escucho ninguno de los discos de The Doors. Tal vez ése era el mensaje. Ya toca.
Canciones:
The Black Keys: “Run Right Back”
Spin Doctors: “What Time Is It?”
Robert Johnson: “Sweet Home Chicago”
Desde luego, soñar con Jim Morrison es algo que no se debe dejar pasar por alto. No recordarás qué tedijo, pero al menos has compartido tu experiencia, genial! Quizás fue un reminder para que escucharas los discos de los Doors. Pues no está tan mal, la verdad, no me importaría que Shannon Hoon me visitara en sueños y me dijera, Toi,a ver si te pones el Nico de vez en cuando…Tenemos top 5 de celebrities que se hayan aparecido en sueños? Qué gran idea, ya estoy haciendo mi lista…
"Su aspecto no era el del insolente sex symbol cuyas fotografías adornan carpetas y paredes. Tampoco el de ese Morrison envejecido, gordo, barbudo y con los ojos hundidos"—"El caso es que allí estaba, y me decía algo. Una frase de esas lapidarias que se le atribuyen al Rey Lagarto en su rol de chamán. Luego desperté. Y ya no recordaba qué me había dicho. Era algo con un cierto mensaje vital a lo carpe diem, pero más provocativo. Tal vez fuera una apología de las sustancias o de sodomizar jovencitas vírgenes."—"Pero como si en realidad no hubiera sino querido gastarme una broma, en cuanto abrí los ojos, fuí incapaz de recordar lo que había dicho"—Interesante… ¿Estás seguro de que no era Ian Astbury? xDDDDDD
¿Pero a que hora fue eso más o menos? porque si es de madrugada vaya putada!! Ahora que si faltaba poco para que sonase el despertador se puede pedonar. Puede que su mensaje fuese algo así como… "Despierta Kar!" jajaja.Por otro lado también pensé como Aitor, a ver si era alguien que se parecía a Jim, jeje. (Algún desperdigao de los Carnavales)Saludos.
Ya tengo la lista: Izzy Stradlin, Eddie Vedder, David Beckham, Harvey Keitel y Elvis.El mejor sueño el de Beckham, yo era la niñera de sus hijos, y encima con dos huevos rechacé sus proposiciones deshonestas.
Yo ya expliqué por aquí un sueño en el que compartía unas copichuelas con Chris Isaak y con el rey juancarlos… (buscar por Chris Isaak)
Tranquilo, no te has vuelto loco… a los dieciséis Eddie Vedder me quitó la virginidad y de vez en cuando sueño con que Keith Richards está en mi cocina…Besicos
TOI BROWNSTONE, no recuerdo un top 5, pero sí relaté por aquí mis encuentros oníricos con Chris Isaak y con Keira Knightley.AITOR, no, no, no era Astbury, porque ni estaba gordo ni llevaba barba. Aunque toparme con Ian Astbury en sueños me acojonaría, no me negarás que el tipo tiene pinta de gastar muy mala leche…KARLAM, igual no era más que una broma, Morrison en realidad se tomaba muy poco en serio esa aureola de líder de masas…TOI BROWNSTONE, niñera de los Beckham… jué, ten cuidado, porque esos son una fábrica de hijos y en nada, te montan un equipo de rubgy.BELÉN, tu sueño con Keith Richards me lo contaste en una ocasión y pasa a ser una de mis anécdotas tuyas favoritas!hale, besos, abrazos y saludos, y sobretodo, gracias por la paciencia frente a la intermitencia que está sufriendo este blog!!
Hola! No puedo creer yo hace un mes una noche de viernes al igual que vos soñe con Jim Morrison. Estaba en su estudio de grabacion tocando el prestigioso piano de Manzarek y luego un alma me dice que no tenia salida y me escape por la ventana. Alli comenze a correr hasta llegar a una casa de 2×2 donde adentro estaba la tumba de Jim Morrison, comenze a abrazar sus paredes y lamentando su muerte hasta que me di vuelta y lo vi a el observandome (tenia el rostro similar al de el video Touch Me) y me sonrie y yo lo abrazo y le digo porque de tantos famosos vivos sin sentido justo vos te tendrias que ir? Tenias mucho por hacer! A lo que me responde que no tenia amor y me toma de las manos y me dice Gracias Jaz. Luego procede y me canta una cancion con su voz pero no pude desifrar cual era y me dijo que vuelva a la noche para seguir hablando. Esa noche volvi y resulta que, a causa de un accidente de choque hacia esa casa, retiraron su tumba porque estaba muerto. Me desperte al instante y me puse a llorar por su realismo y mezcla de sensaciones
JAAZZ, qué cosas tienen los sueños, yo no recuerdo qué me decía Jim en el mío, tú no recuerdas qué canción te cantó… qué extraños mecanismos tiene la mente!